Nos encontramos en un mes donde todos los salvadoreños hablamos acerca de la independencia. Discutimos sobre las fechas históricas y reflexionamos sobre el presente de nuestro país. Esta vez, quiero llevarlos a pensar en una palabra que complementa el sentimiento de libertad y unión, la palabra ciudadanía.
Escrito por Elvia Mondragón, graduada del Centro ¡Supérate! CASSA San Miguel.
Luis Moreno en su artículo, Ciudadanía, desigualdad social y Estado del bienestar explica que el término ciudadanía en el siglo XXI se entiende como “la condición de pertenencia y participación en la politeya, u organización política donde se integran los miembros de la sociedad”. También, amplía el concepto y describe que podemos entenderlo como un “estatus conformado por el acceso a los recursos básicos para el ejercicio de derechos y deberes”.
A simple vista, el significado suena complicado o tedioso, sin embargo, es más fácil entenderlo como la unión entre el ciudadano y el estado al que pertenece.
En la actualidad, en medio de un ambiente social tan desigual, confuso y hasta cierto punto, hostil en redes sociales y en la vida cotidiana, se vuelve necesario también hacer énfasis en el concepto “ciudadanía en las redes sociales”.
Hacer ciudadanía en canales digitales como las redes sociales, significa manejarte a través de cuentas reales, no fake (falsas), respetar las opiniones de los demás usuarios, tolerar que tu opinión no es la verdad absoluta y entender que las redes son un espacio de diálogo que pueden potenciar la democracia o irla minimizando. En este mes de tanta importancia histórica es necesario reflexionar sobre lo que necesitamos construir y de-construir.
Construyamos una cultura de paz en lo cotidiano, en lo digital, trabajemos en la resolución de conflictos para llegar a acuerdos y consensos de país. Como ciudadanos salvadoreños tenemos el derecho y el deber de velar por un mayor desarrollo de nuestra nación, no sólo en la parte económica, sino social y humana. Una sociedad enfocada en la práctica de valores que creen respeto y empatía hacia los demás.
Deconstruyamos la desinformación con mayor educación, seamos autodidactas, analicemos los sucesos mediáticos y los sucesos del ámbito político. Estudiemos las causas y las consecuencias de los hechos, verifiquemos la información. Hagamos mayor contraloría ciudadana cuestionando a nuestros gobernantes o funcionarios públicos.
Este contexto general del país amerita que estemos a la altura de él y que nos comprometamos en velar por el respeto de los derechos humanos y cumplamos con los deberes que nos corresponden.
Podemos construir democracia, tomando nuestra parte, trabajando con responsabilidad, aportando en nuestra comunidad y siendo dedicados en nuestro lugar de estudio. Acciones como botar la basura en su lugar abonan a una cultura de paz. Acciones como ir a votar, participar en procesos políticos no partidarios y partidarios también construyen democracia.
En el Programa Empresarial ¡Supérate! fomentamos y practicamos los valores, tenemos 5 que representan lo que somos: solidaridad, integridad, superación liderazgo y excelencia. Únete con nosotros a practicarlos y a fomentar la paz, la bondad y el respeto.
Estos valores se promueven dentro de nuestra cultura ¡Supérate!, nos definen como estudiantes, maestros, directores, aliados y cooperantes porque nos han enseñado que si los practicamos podemos promover ciudadanía.
Para finalizar, reflexionemos sobre la práctica de valorar a las personas que están a nuestro alrededor, respetar las diferencias y ser solidarios, construyamos paz, construyamos país.
Walk the extra mile, give back and raise the bar.